Desde el Arts & Crafts hasta la Bauhahus y el Regionalismo Tapatío

Luis Oscar De León González
25 ago 2017
2 Min. de lectura

El arts & crafts nació en Escocia, en el Reino Unido, en la ciudad de Edimburgo, a finales del siglo XIX, traído por las parejas Williams y Mackintosh. Es un trabajo que funciona como preámbulo para la antiestética y los conceptualismos; resignificar los objetos de corte industrial y darles su originalidad con intervención artesanal, una forma de hacer el arte funcional y a la vez estético.

De este movimiento continúa el linaje, en diferentes países como Francia y Estados Unidos se toma cómo inspiración para el Art Noveau y el Art Deco; movimientos que aprovechaban los espacios, la arquitectura y la era industrial para dar su mensaje, un mensaje que me parece un tanto consumista, pero que su intensión resulta incluyente en cuanto a arte se refiere, pues acredita el trabajo obrero y artesanal y se le incluye en este mundo elitista.

La Bauhaus nace en Weimar, Alemania, dentro del primer cuarto del siglo XX, y su discurso resultará un parteaguas en el mundo del arte, lo cual impulsará otros movimientos más adelante. Su concepto es “el arte está en la idea y no en el objeto” fomentar el uso de materiales locales y darles la importancia que merecen, con la intención de dar funcionalidad al arte y propiciar a que se produzcan objetos con estos requerimientos en muchos lugares del mundo. Esta concepción de arte se liga directamente al regionalismo tapatío, la influencia de estas escuelas podemos apreciarla en los diseños arquitectónicos de casas en las colonias Moderna y Americana, dentro de la ciudad, un arte local que propició una identidad cultural a la ciudad.

El nacimiento de la idea de “arte funcional” fue un antes y un después en la historia del arte, y no es más que un síntoma de la modernidad a la que el mundo está entrando, las industrias, la división de clases obreras y burguesía, los productos hechos en serie, los miedos de las sociedades en convertirse en masas distópicas, con el remplazo del trabajo humano por el de las máquinas; estos pensamientos son muy notables en los manifiestos artísticos de la época. Y gracias a estos hoy en día le damos mérito a profesiones como la artesanía y el diseño, expresiones artísticas que forman parte de nuestra cotidianidad y facilitan nuestras vidas, dejando un registro de lo que somos y pensamos en diferentes épocas.