Dadaísmo: La antítesis a lo moderno

El dadaísmo surge como movimiento en el Cabaret Voltaire de Zurich, por su iniciador Hugo Stieglitz, y es considerado como lo anterior al conceptualismo.

Dadá es una palabra que resulta ambigua pues tiene diferentes significados en diferentes idiomas, sin embargo, no aporta nada al movimiento y sus ideales. Desde aquí podemos conocer las intenciones de los dadaístas, evocan a quitarle el significado a todo, en un mundo postguerra y postmecánico, donde el sentido del arte está perdido.

El uso del collage, resignificar obras clásicas, alterar los objetos cotidianos y llevarlos a salas de museos, crear poesía y música sin sentido gramático, estas prácticas irreverentes no tenían sentido alguno mas que mofarse del sistema establecido, una forma alternativa de tener voz sin la necesidad de ser considerado un artísta por una alta institución. Una herramienta de soicalización del arte, que sólo se pudo dar en consecuencia a las guerras y los escenarios más bajos que ha tocado la ética y la moral humana.

Después de esto es que muchos artístas descubren que de verdad pueden ganar dinero y burlar al sistema con sus creaciones, lo que dio inicio al Ready Made y Arte Conceptual. Ambos ya existían en el dadaísmo, pero en su siguiente etapa dejó de ser sólo una burla y se llenó de significados.