Videoarte y videoclip

El videoarte nace en la decada de los sesentas, , concepto creado por Salvador Dalí, donde lo abstracto y surreal adquiere movimiento gracias a las nuevas tecnologias que se están creando en el mundo.

Un nuevo mundo abierto de posibilidades, donde nacen movimientos como el fluxus, el performance adquiere un nuevo significado y se adquiere el poder de la difusión del arte através del video.

El padre del videoarte: Nam June Paik, adquiere una cámara de video y experimenta con diversos materiales para la crítica social, en especial a la cultura de la televisión, y como las personas han camibado sus estilos de vida y se han consumido por la mediación de las cajas del entretenimiento.

En este momento de la historia el mundo vivía grandes cambios, atravesaba por crisis nucleares por la guerra fría, la guerra de Vietnam, los movimientos pacifistas. Fue el momento perfecto para comenzar a experimentar nuevas formas del arte y estos artístas explotaron todo el potencial de las nuevas tecnologías.

Lo que no se esperaban fue que su arte, que en un incio era una protesta contra el sistema, terminó influenciando muchas formas del entretenimiento televisivo y comercial; como lo es el videoclip.

En este punto es donde surge la cuestión ¿el videoarte deja de ser arte en un videoclip? o ¿puede el videoclip ser considerado como videarte? ¿bajo que estándares? la discusión eterna se acrecienta con esta batalla de lo artístico contra lo comercial. Los puristas defendiendo el videoarte como se concibió y los que son más abiertos a aceptar que la música se puede acompañar del videclip como otra manifestación social y de crítica, como bien está el ejemplo de Pipilotti Ristt y Beyoncé influenciándose en ella.